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7 octubre, 2024 - Lectura 3 minutos.
7 octubre, 2024 - Lectura 3 minutos.
Autolab / Averías
Si conduces un carro con transmisión manual, sabrás que el embrague es un componente crucial que conecta y desconecta la transmisión del motor, permitiendo cambiar de marcha. Se activa presionando el pedal del embrague, ubicado en el área del piso del lado del conductor, a la izquierda del pedal del freno.
Aunque es raro, puede suceder que el embrague falle mientras conduces. Esto puede deberse a una rotura del pedal del embrague o a un fallo del disco del embrague. Cuando esto ocurre, al presionar el pedal del embrague, no se activa, impidiendo cambiar de marcha de la manera tradicional.
Sin embargo, es posible seguir conduciendo hasta que necesites detenerte. Conducir un carro con transmisión manual sin usar el embrague es complicado y puede dañar la transmisión, por lo que solo debe hacerse en caso de emergencia y durante un breve período de tiempo.
Cuando conduces un carro con transmisión manual y falla el embrague, puedes acelerar y cambiar a una marcha superior. Este proceso no es suave y será brusco, ya que no puedes usar el embrague para facilitar la transición entre marchas.
Acelera el carro hasta alcanzar el punto adecuado para el cambio de marcha. Este punto varía según el carro, pero un buen rango para probar es cambiar a una marcha superior entre 3000 y 3500 RPM.
Mientras sueltas el acelerador, la transmisión no tiene presión. La palanca de cambios debería salir con un ligero esfuerzo. Si esperas demasiado para sacar la palanca de cambios de la marcha, es posible que tengas que acelerar el motor nuevamente e intentarlo de nuevo.
Si estás en tercera marcha, presiona la palanca de cambios contra la posición de la cuarta marcha. Aplica una presión moderada y constante contra la palanca de cambios a medida que las RPM del motor disminuyen. Una vez que las RPM coincidan con la velocidad de la transmisión, la palanca de cambios se deslizará hacia la marcha. Si presionas con demasiada fuerza, los engranajes rechinarán, y si presionas con demasiada suavidad, puedes perder la marcha.
Inmediatamente después de que la palanca de cambios se deslice hasta su lugar, presiona el acelerador para acelerar. De esta manera, puedes continuar con todo tu rango de marchas.
Conducir sin el uso del embrague es una medida de emergencia y debe hacerse con mucho cuidado para evitar daños severos en la transmisión. Es recomendable que, tan pronto como sea posible, lleves tu carro a un taller para que un mecánico experto revise y repare el sistema del embrague. En Autolab, los técnicos están capacitados para diagnosticar y solucionar problemas con el embrague y la transmisión, garantizando que tu carro vuelva a estar en perfecto estado para su uso diario.
Así como puedes cambiar a una marcha superior sin usar el embrague, también es posible hacerlo para una marcha inferior. Dado que el embrague no se utiliza o no funciona, tendrás que usar el acelerador para controlar la desaceleración del carro.
La velocidad del carro disminuirá lentamente al levantar el pie del acelerador. Este es el primer paso para prepararte para el cambio de marcha.
La transmisión estará en punto muerto una vez que saques la marcha. Para facilitar esto, es posible que necesites “acelerar” ligeramente. Presiona el acelerador suavemente durante un segundo y luego suelta la presión. Esto alivia la presión en la transmisión, permitiéndote sacar la palanca de cambios de la marcha.
Las RPM deben ser aproximadamente iguales a las que tendrías a la misma velocidad en la marcha más baja. Por ejemplo, si estás en tercera marcha y necesitas cambiar a segunda, alrededor de 1200 RPM en tercera marcha alcanzarán una velocidad similar a 2500 RPM en segunda marcha.
Mantén la palanca de cambios contra la marcha ejerciendo una presión moderada. Al igual que al cambiar a una marcha superior, demasiada presión provocará rechinamiento de los engranajes y muy poca presión puede hacer que pierdas el cambio.
Cuando la velocidad del motor coincida con la velocidad de la transmisión en la marcha que deseas, la palanca de cambios se deslizará hasta su lugar. Utiliza el acelerador para mantener la velocidad o suelta el acelerador para desacelerar y realizar otro cambio descendente.
Conducir un carro con transmisión manual sin utilizar el embrague solo es posible cuando el carro ya está en movimiento. Si estás detenido y el embrague no funciona, este método no te servirá. No hay forma de engranar la primera marcha desde parado sin el embrague, lo que significa que este procedimiento solo puede usarse temporalmente para mantener el movimiento del carro hasta que puedas detenerte de manera segura.
Es esencial que uno de los profesionales certificados de Autolab inspeccione y repare el embrague de tu carro si experimentas estos problemas. Conducir sin un embrague funcional no solo es difícil y potencialmente dañino para tu transmisión, sino que también puede ser peligroso. Los técnicos de Autolab están capacitados para diagnosticar y solucionar problemas del embrague, asegurando que tu carro vuelva a estar en perfecto estado para su uso diario.
Siguiendo estas pautas, podrás manejar una situación de emergencia donde el embrague falle, manteniendo la seguridad y minimizando el daño a tu carro. Recuerda que estas técnicas son solo soluciones temporales y que debes buscar asistencia profesional lo antes posible.
¿Experimentaste problemas con el embrague de tu carro? En Autolab tenemos la solución. Agenda ahora mismo un servicio de inspección y reparación con nuestros técnicos especializados en transmisiones y embragues. ¡Recupera la tranquilidad al volante y garantiza el correcto funcionamiento de tu vehículo! Haz clic aquí para agendar tu cita.
Nuestra propuesta de valor es ayudarle a nuestros clientes a gestionar eficientemente el mantenimiento de sus vehículos.
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