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9 octubre, 2024 - Lectura 3 minutos.
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Autolab / Consejos
Cuando se mencionan las palabras “robo” y “automóvil” en conjunto, muchas personas suelen imaginar escenarios como ventanas rotas, radios o equipos de audio desaparecidos, o incluso el vehículo completamente robado. Sin embargo, hay un componente específico de los vehículos que, a pesar de su importancia y valor, a menudo pasa desapercibido: el convertidor catalítico.
El convertidor catalítico es una parte esencial del sistema de escape de los vehículos. Su función principal es reducir la cantidad de gases contaminantes que el motor produce al convertirlos en sustancias menos dañinas. Este componente se convirtió en un elemento obligatorio en los vehículos desde la década de 1970 debido a las normativas ambientales que buscan reducir la contaminación del aire.
Ubicado cerca del colector de escape del motor, el convertidor catalítico es fácilmente visible desde la parte inferior del carro. Está diseñado con una estructura de células porosas que están recubiertas con una mezcla de metales preciosos, como el platino, el rodio y el paladio. Estos metales actúan como catalizadores en las reacciones químicas que transforman los gases nocivos en compuestos menos perjudiciales.
Los convertidores catalíticos son particularmente atractivos para los ladrones debido a los metales preciosos que contienen. El platino, el rodio y el paladio son metales que tienen un alto valor en el mercado de metales preciosos y son necesarios en la industria para diversos usos, incluidos los catalizadores en la industria automotriz y en otros procesos industriales.
Cuando estos metales son recuperados y vendidos a depósitos de chatarra no regulados, pueden alcanzar un valor de aproximadamente 200 dólares por convertidor, aunque este precio puede variar dependiendo de la calidad y la cantidad de metal precioso presente. Los precios fluctuantes de estos metales pueden influir en la frecuencia de los robos: cuando los precios suben, también lo hace el número de robos.
Reemplazar un convertidor catalítico no es barato. Los costos pueden variar entre 500 y más de 2000 dólares, dependiendo de la marca y el modelo del carro, así como de la calidad del convertidor. Además del costo del propio convertidor, hay que considerar los posibles daños en las piezas circundantes, que pueden incrementar el costo total de la reparación. El vehículo no funcionará de manera óptima sin un convertidor catalítico, y conducir sin uno no es legal debido a las normativas de emisiones.
Los ladrones suelen buscar vehículos con convertidores catalíticos que sean de fácil acceso, como camionetas y algunos todoterrenos, ya que estos suelen estar elevados del suelo, facilitando el acceso sin necesidad de levantar el vehículo con un gato. Los estacionamientos mal iluminados y poco vigilados son lugares comunes para estos robos, ya que los ladrones prefieren operar en áreas donde tienen menos riesgo de ser vistos.
Para robar un convertidor catalítico, los ladrones generalmente usan una sierra para cortar las tuberías de escape que lo conectan al sistema de escape del motor. En algunos casos, colocan una tabla o utilizan un gato para levantar el carro y facilitar el acceso. El proceso es relativamente rápido y puede tomar solo unos minutos.
Si te han robado el convertidor catalítico, es probable que notes los siguientes síntomas inmediatamente después de encender el vehículo:
Sonido fuerte y rugiente: Sin el convertidor catalítico, el sistema de escape no puede filtrar los gases correctamente, lo que provoca un ruido intenso y rugiente del motor. Este sonido suele ser más prominente al acelerar y es causado por la falta de filtrado de los gases de escape.
Conducción irregular: El carro puede presentar una conducción irregular y producir chispas o ruidos al cambiar de velocidad. Esto se debe a que los gases de escape no están siendo procesados adecuadamente, lo que afecta el rendimiento del motor.
Daños visibles: Al mirar debajo del carro desde la parte trasera, es probable que veas un gran agujero en el sistema de escape, cerca del centro, así como piezas de tuberías arrancadas. La ausencia del convertidor catalítico es fácilmente visible.
Para proteger tu vehículo del robo del convertidor catalítico, es importante tomar varias medidas preventivas que pueden disuadir a los ladrones. Aquí te ofrecemos seis consejos prácticos:
Estaciona en áreas bien iluminadas: Siempre que sea posible, estaciona tu carro en lugares bien iluminados, cerca de entradas de edificios o calles transitadas. La visibilidad aumenta el riesgo de ser visto por el público y disuade a los ladrones de intentar robar el convertidor.
Utiliza un garaje personal: Si tienes un garaje en casa, estaciona tu carro dentro y asegúrate de mantener la puerta cerrada. Un garaje cerrado actúa como una barrera adicional que puede prevenir el robo.
Instala videovigilancia: La instalación de cámaras de seguridad en la zona donde aparcas tu carro puede servir como un fuerte disuasivo para los ladrones. Las cámaras también pueden proporcionar evidencia crucial en caso de un robo.
Añade dispositivos de seguridad específicos: Existen dispositivos diseñados específicamente para proteger el convertidor catalítico, como protectores de catalizador que dificultan su extracción. Otra opción es soldar el convertidor al chasis del vehículo o grabar el número de bastidor en el convertidor para hacerlo menos atractivo para los ladrones.
Ajusta el sistema de seguridad del carro: Si tu vehículo ya cuenta con un sistema de seguridad, configúralo para que se active ante vibraciones o movimientos, como los que produce una sierra al cortar el convertidor.
Notifica a las autoridades: Si descubres que te han robado el convertidor catalítico, contacta de inmediato al departamento de policía y proporciona toda la información posible sobre el robo. Además, informa a los depósitos de chatarra locales para que estén alerta en caso de que alguien intente vender un convertidor catalítico robado.
La mejor manera de prevenir el robo de tu convertidor catalítico es dificultar el acceso al mismo tanto como sea posible. Esto incluye estacionar de manera inteligente, instalar dispositivos de seguridad, y estar atento a los aumentos en los robos en tu área. Al tomar medidas preventivas y mantener un ojo en la seguridad de tu vehículo, puedes reducir significativamente el riesgo de ser víctima de este tipo de robo.
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Nuestra propuesta de valor es ayudarle a nuestros clientes a gestionar eficientemente el mantenimiento de sus vehículos.
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