Pagina de inicio ► Mantenimientos
18 septiembre, 2024 - Lectura 3 minutos.
18 septiembre, 2024 - Lectura 3 minutos.
Autolab / Mantenimientos
El aceite de motor es uno de los componentes más esenciales para mantener el buen estado de cualquier vehículo, y aunque muchos propietarios lo pasan por alto, su función va mucho más allá de simplemente «mantener el motor funcionando». En esta entrada, vamos a profundizar en cómo el aceite contribuye al rendimiento y la durabilidad del motor, qué tipos de aceite existen y por qué es fundamental elegir el correcto según las necesidades de tu carro. También hablaremos sobre la viscosidad y la frecuencia con la que deberías cambiar el aceite, dos aspectos clave que a menudo se malinterpretan. Para un vehículo en Colombia, donde las temperaturas y las condiciones de manejo pueden variar significativamente entre regiones, estas consideraciones son especialmente importantes.
El aceite de motor es el «alma» del motor. Sin él, simplemente no podría funcionar por mucho tiempo. Este fluido se encarga de tres tareas principales: lubricar, limpiar y enfriar. Vamos a desglosar cada una de estas funciones.
Dentro del motor, hay decenas de piezas móviles que trabajan en un espacio confinado y a gran velocidad. Componentes como pistones, bielas y válvulas generan fricción al entrar en contacto unos con otros. La fricción no solo desgasta estas piezas, sino que también genera calor, lo que aumenta el riesgo de deformaciones o daños permanentes. El aceite de motor crea una película protectora que reduce esta fricción, permitiendo que el motor funcione de manera más suave y eficiente.
Ejemplo práctico: Imagina dos superficies metálicas frotándose una contra la otra sin lubricación, como dos cuchillas sin filo que se rozan. En poco tiempo, el metal se sobrecalienta, se desgasta e incluso podría fundirse. Eso es lo que sucede en un motor sin el aceite
Imagen: Lubricación del motor
Otra función crucial del aceite es actuar como un «detergente» para el motor. Durante la combustión del combustible (gasolina), se generan pequeños residuos que, si se acumulan, pueden formar depósitos dentro del motor. Estos residuos, conocidos como lodo o «barniz», obstruyen los canales del motor y deterioran su rendimiento. El aceite arrastra esas partículas, manteniendo las partes internas limpias y optimizando la combustión. Aquí es donde entra en juego el filtro de aceite, que captura esas partículas para que no vuelvan a circular por el motor.
Si no se realiza un cambio de aceite a tiempo, los contaminantes empiezan a acumularse, afectando el flujo de aceite y, por ende, la lubricación. Esto puede generar problemas como pérdida de potencia o sobrecalentamiento.
Muchos conductores piensan que solo el refrigerante (mal llamado anticongelante) y el radiador son los encargados de mantener la temperatura del motor bajo control, pero el aceite también cumple un rol importante en la disipación del calor. A medida que el motor genera calor debido a la combustión, el aceite absorbe parte de este y lo distribuye por todo el sistema, evitando que puntos críticos se sobrecalienten.
Dato importante: En un país como Colombia, donde algunas zonas tienen climas cálidos durante todo el año, la capacidad del aceite para regular la temperatura es especialmente crucial. Si conduces en regiones como la costa o zonas montañosas, es fundamental revisar con más frecuencia tanto el nivel de aceite como su estado.
El aceite de motor es esencial para el buen funcionamiento de tu carro, ya que se encarga de lubricar las partes internas del motor, reducir la fricción, y mantener la temperatura bajo control. Sin embargo, no todos los aceites son iguales, y elegir el adecuado puede marcar la diferencia entre un motor que funcione de manera óptima y uno que esté en riesgo de sufrir daños. Hay tres tipos principales de aceite en el mercado: minerales, sintéticos y semisintéticos, cada uno con características específicas que lo hacen más adecuado para ciertos tipos de vehículos y condiciones de manejo.
Aceite mineral: Es el tipo más básico y generalmente el más económico. Se deriva directamente del petróleo crudo, y aunque cumple con las funciones esenciales de lubricación, su durabilidad es menor que la de los aceites sintéticos.
Aceite sintético: Está formulado químicamente para ofrecer un rendimiento superior, soportando mejor temperaturas extremas y proporcionando una mayor protección contra el desgaste. Estos aceites son más costosos, pero también permiten intervalos de cambio más largos.
Aceite semisintético: Como su nombre indica, es una mezcla de aceites minerales y sintéticos. Ofrece un equilibrio entre costo y rendimiento, siendo una opción intermedia para quienes buscan mayor protección que el aceite mineral, sin llegar al costo de los sintéticos.
A pesar de las recomendaciones generales, consultar el manual del propietario de tu carro es fundamental. El fabricante especifica el tipo de aceite y el grado de viscosidad que mejor se ajusta a tu motor. Usar un aceite diferente al recomendado puede afectar el rendimiento del motor, provocar un desgaste prematuro y, en algunos casos, anular la garantía del vehículo.
Un factor clave en la elección del aceite es la viscosidad, que se refiere a qué tan fácil o difícil fluye el aceite. Este aspecto es vital porque el aceite debe ser lo suficientemente fluido para recorrer todas las partes móviles del motor, pero también lo suficientemente espeso para mantener una capa protectora en condiciones de calor.
Para entender mejor la viscosidad, imagina la diferencia entre la miel y el agua. La miel es un líquido denso y se mueve lentamente, mientras que el agua fluye rápidamente. De forma similar, un aceite más viscoso (espeso) se moverá con menos facilidad que uno de menor viscosidad. Sin embargo, el motor necesita que el aceite sea fluido durante los arranques en frío y lo suficientemente espeso para mantener su protección cuando el motor alcanza temperaturas elevadas.
Los aceites multigrado, como el 5W-30, están diseñados para cumplir esta función. El número seguido de la «W» (que significa «winter» o invierno) indica cómo fluye el aceite en frío, mientras que el segundo número refleja su comportamiento en temperaturas altas. Así, un aceite 5W-30 es suficientemente delgado para proteger el motor al encenderse en las mañanas frías, pero también lo suficientemente viscoso para cuando el motor está caliente en un día caluroso.
El momento ideal para cambiar el aceite puede variar según el modelo de tu carro y las condiciones de manejo. Por lo general, los fabricantes recomiendan cambiarlo entre 5,000 y 10,000 kilómetros, pero si tu carro enfrenta condiciones exigentes, como tránsito pesado, trayectos cortos frecuentes o ambientes polvorientos, es recomendable hacerlo más seguido.
Un ejemplo común en ciudades colombianas como Bogotá o Medellín es el tráfico constante en las horas pico. Estos atascos hacen que el motor trabaje bajo condiciones más duras, lo que puede acelerar la degradación del aceite. En estas circunstancias, cambiar el aceite regularmente es crucial para evitar que pierda sus propiedades lubricantes y protectoras.
Un aceite que no se cambia a tiempo se contamina con residuos de combustión y puede perder su capacidad para proteger el motor. Si el aceite se vuelve demasiado delgado o se llena de partículas, el motor puede no recibir la lubricación adecuada, lo que aumenta el desgaste de las piezas internas y eleva el riesgo de averías graves.
La viscosidad del aceite se mide usando un dispositivo llamado viscosímetro, que mide la velocidad con la que el aceite fluye a diferentes temperaturas. Los aceites multigrado están diseñados para mantener un rendimiento adecuado tanto en climas fríos como en temperaturas elevadas, lo que los convierte en una opción ideal para el clima variado de Colombia, donde puedes encontrarte con temperaturas frías en las mañanas y calor intenso al mediodía, especialmente en ciudades de clima cálido como Cali o Cartagena.
Además, los aceites multigrado incluyen aditivos que mejoran su rendimiento. Sin embargo, con el tiempo, estos aditivos se desgastan, lo que afecta la capacidad del aceite para proteger el motor. Por eso, incluso si no has alcanzado el kilometraje recomendado para el cambio de aceite, siempre es importante revisar su estado y cambiarlo si es necesario.
Recuerda que si necesitas un cambio de aceite o simplemente quieres asegurarte de que tu carro está en óptimas condiciones, agenda una cita con los expertos en Autolab. Visita www.autolab.com.co y deja que cuidemos de tu carro como se merece. ¡Tu motor te lo agradecerá!
Nuestra propuesta de valor es ayudarle a nuestros clientes a gestionar eficientemente el mantenimiento de sus vehículos.
Tipos de Unidades con las que trabajamos
Ligeros
Semi pesados
Pesados
Conoce nuestros servicio puerta a puerta, llevamos tú vehículo a nuestro taller especializado o el servicio a domicilio, donde reparamos tu vehículo en casa sin costo adicional.